miércoles, 21 de octubre de 2009

Eddie Murphy (SRN#3)

Parafraseando al poeta (sus sucesores me perdonen), mi infancia son recuerdos de películas de Eddie Murphy. Qué grandes aquellas mañanas de sábado en la que metías la cinta de VHS en el vídeo y tu única preocupación era ver la peli de turno tomándote el Nesquick (sí, yo nunca fui de Cola-Cao, qué le vamos a hacer...). Entre mis pelis preferidas siempre estuvieron las de Eddie Murphy (nacido Edward Regan Murphy en 1961), pero no todas, sino básicamente cuatro, que son de las que hablaré aquí: Superdetective en Hollywood I y II (1984 y 1987), El chico de oro (1986) y El príncipe de Zamunda (1988) Vamos, que yo no soy fan de toda la carrera de Eddie Murphy, sino fundamentalmente de estas cuatro pelis, ya que después empezó con los doctores doolittle y los profesores chiflados que ya no me convencieron tanto. Pero estas cuatro no envejecen para mí, son eternas e imperecederas como el polvo de las estrellas (toma frase).

SUPERDETECTIVE EN HOLLYWOOD
Tres entregas se rodaron de esta saga, pero yo me quedo con las dos primeras. En la primera acompañaremos al detective de Detroit Axel Foley a Beverly Hills, donde investigará la muerte de su amigo Mikey Tandino. En Beverly Hills chocará con dos cosas: sus compañeros del departamento de policía, el detective William "Billy" Rosewood, interpretado por Judge Reinhold, y el sargento John Taggart (John Ashton), y la banda mafiosa de Victor Maitlan, interpretado por Seven Berkoff.
Como recuerdos míticos y entrañables de esta peli destacaré la gran banda sonora, la frase "yo antes era musulmán y aquí huele a cerdo.. a ver.. sí, cerdo", el coche destartalado de Axel y el tiroteo final en la mansión de Maitland, donde Taggart y Rosewood descubren su paralelismo con Dos hombres y un destino.
En la segunda entrega nos encontramos con que el teniente Bogomil (otro entrañable personaje de la saga) es tiroeado mientras investiga unos misteriosos asesinatos. Esto hace que Axel vuelva a visitar Beverly Hills, encuentre un "alojamiento" a su medida y empiece a investigar al "asesino del abecedario". Habrá también nuevos compañeros en la comisaría de Beverly Hills que sufrirán a Foley pero Taggart y Rosewood volverán a aparecer, porque sin ellos esta saga no sería lo mismo. Aquí abajo os dejo la tríada mítica de polis de Beverly Hills.
EL CHICO DE ORO
Esta es una película totalmente gloriosa para mí, forma parte de mi educación visual, para bien o para mal y he de decir que el año pasado estuve en Nepal y unos días antes de coger el avión me puse esta peli para recordar a Chandler Jarrell caminando por Kathmandu buscando un lorito mágico y siendo timado por un nativo con muy mala baba ("con el remo, con el remo te voy a dar cuando te encuentre!!!"). Chandler Jarrell, que trabaja en una especie de asociación de defensa de la infancia (nunca lo tuve muy claro) es seleccionado como "El Elegido "por parte de unos nepalíes raros con el fin de liberar al chico de oro de las garras de uno de los malos más míticos que dio el cine ochentero: Sardo Numspa. Para matar a este deberá primero hacerse con la daga de Adjantis ("Sólo el elegido logrará la daga y sólo un hombre de culo estrecho bajará por estas escaleras").

Yo tengo grabadas en la mente escenas de esta peli, como el cántico de Jarrell "Yo, yo, yo , yo, yo, yo, yo, yo quiero el chuchillooooooo" mientras giraba los rodillos tibetanos de oración, el sueño de Axel con Fu, el gordito y hasta un caballo que se pasea por ahí, Charlotte Lewis atada con papel de váter, ayyy... son tantos. La escena de la lucha final con Sardo Numspa (no confundir con Numspi, cuidao) transformado en demonio, vista hoy, es un poco cutrecilla, pero la peli sigue teniendo mucho encanto para mí y la sigo viendo con una sonrisa en los labios.

EL PRÍNCIPE DE ZAMUNDA
Otra más o menos como la anterior, vivero de frases que aún hoy sigo utilizando ("Kunta, el de arriba, Kunta", "A la mierda, a la mierda y a la mierda", "Ese chico sabe cantar"...), cuenta la altamente surrealista historia de un príncipe africano con el dinero por castigo que se va a Queens, Nueva York, a buscar una esposa que le mole de verdad y no la bobainas que le ha buscado su padre. En esta peli Eddie Murphy comenzó a hacer algo que luego repetirá en pelis posteriores (aunque con menos fortuna): interpretar a varios personajes, y se ve acompañado de un grande al que también queremos homenajear en esta Semana del Reconocimiento Negro (por cierto, este nombre tambien proviene de esta peli): Arsenio Hall, que también interpreta varios personajes.

Uno de los personajes interpretados por Murphy es Randy Watson, que canta con su grupo "Chocolate sexy" otro de los himnos de los miembros de este cineclub: Creo que el futuro es de los niños. Con él os dejo, no sin antes expresar a Eddie Murphy mi homenaje desde esta pequeña (pero intensa) entrada.


3 comentarios:

  1. Gran entrada, el Eddie Murphy es un grande entre los grandes... pero me hacéis trabajar mucho con el blooooog... taxiiiiiista!

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  2. No te quejes, si en el fondo lo pasas bien. Ese Corel Draw!!!!!!!

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  3. EDDIE EDDIE!!!!!!!!!!!!!!que grande, pena que ya no haga películas tan buenas como antes, pero siempre quedará en el recuerdo de nuestras retinas aquellos entrañables momentos.

    Niños niños, no pelearse!!!!!!!

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